MAÑANA , "GÜELGA" GENERAL

¡Jo, tío, vaya lío con esto de la güelga general que dicen que es sindical! Que dicen, que lo dice nadie sabe quién. Lo cierto es que se lleva tiempo preparando este follón para mañana.Los sindicatos, que cada vez tienen menos afiliados y cada vez dependen más del Gobierno, digan lo que digan, piden que la huelga sea masiva, que todo bicho viviente tire la casa por la ventana y salga a la calle, no sabemos si a pedir peras al olmo o a pedir que Bruselas les atienda más que el Gobierno de Zapatero les atiende. No lo sé. Lo que se sabe es que, quien monta esta huelga, está haciendo el caldo gordo, y con buen compango, a la Iglesia, que nunca la ha visto más gorda para zumbarle al presidente del Gobierno.

Y hay quien dice también que están --los sindicatos-- haciendo la cama a Zapatero para que se acueste en ella un Pepé , que a la vista está lo que ye: un pandemónium que no hay quién lo entienda y,además de no lo entender, no ofrecen nada que merezca la pena ni es de considerar ni de atender. La gente lisa y lasa no sabe de qué va la cosa. Y es posible que pensando mal como piensa, acierte. O sea, que en este caos de río revuelto va a haber pescadores que saquen ganancia . Ya se verá al Pepé sacar pecho y apuntar el de Zapatero, diciéndole lo habido y por haber.

En las cuencas mineras --antaño más que ahora-- nadie sabe a qué santo se celebran huelgas. Hay quien dice que para salvar la minería, que cada vez va en mayor declive; hay quien dice que para salvar los no pocos liberados que viven a expensas de los sindicatos y hay quien dice que los sindicatos montan este lío para seguir, como la Iglesia, sacando al Estado su modus vivendi, o sea el pan, más que nuestro, de ello, que pobres, si desaparece el carbón, se acabó el panchón y adiós con la colorá...

Los que hemos vividos, padecido, sufrido y organizado--de algún modo-- las huelgas mineras de 1960-62 si sabíamos el por qué de las mismas. Porque se trabajaba mucho y se ganaba escasamente para comer. Ahora, por más que pidan un aporte masivo a la huelga de mañana, quien más y quien menos ve las cosas poco claras. Se cree que hay mangoneos políticos, doble fondo en lo que se organiza y no una reivindicación social. O sea, que cada cual habla de la feria según la ve en ella. Y así están las cosas.

Mientras tanto se ven caravanas de vehículos con banderas al viento, altavoces y megafonías a todo volumen advirtiendo que hay que cerrar todo, todo y al decir todo, se dice todo, no sé si dice "so pena de mayores consecuencias", eso no sé si lo dicen, pero hay quien, por si las moscas, lo piensa. Así que mañana no hay que abrir ni los ojos para despertar.

Resumiendo, que nadie dio a la Iglesia más que Zapatero y de nadie recibió más criticas, censuras y repulsas Zapatero que de la Iglesia. Los sindicatos, nunca fueron más mimados que los son actualmente de Zapatero, pero nunca unos sindicatos se mostraron más ingratos con Zapatero que los sindicatos de hoy, organizadores del lío de la Huelga General de mañana.Y como en política vale todo, aunque haya quien diga que no, ya veremos- ya se verá- al Pepé aprovechar la ocasión para minar a Zapatero y, si les es posible, derribarlo, que eso llevan queriendo hacer desde que ocupa la presidencia.

Y es que esta España es así, retorcida cuando se cree derecha. (Y de derechas también). Y nada mejor que aprovechar la huelga de mañana para culpar a Zapatero de todo lo suyo, bueno y malo, y de todo lo demás, como la crisis que originaron los bancos, los ricos, los especuladores, los grandes trush y las grandes mafias que en el mundo son. Y es que nada mejor que tener a un tipo como Zapatero que sirva de tiro al blanco, hasta que le saquen los ojos. Y luego dirán que, estando ciego, cómo iba a ver los problemas que acuciaban a España...Y si no es eso exactamente, pues aproximado.

MENUDA LA QUE SE HA ARMADO

Ciudadano rumano, dando ejemplo
de que modo hay que trabajar
para vivir.

Lo saben ustedes. La decisión de Sarkozy de expulsar de Francia a los gitanos rumanos, ha originado la de Dios es Cristo. La expulsión en cuestión, no es porque sean, lisa y llanamente, gitanos, ni porque sean rumanos, sino porque, como se da la circunstancia de que, al ser gitanos y rumanos, cuya forma de vida es la forma innata de quien vive del aire, eso es, del aire de lo que apañan de los demás, o sea, entre la rapiña y la mendicidad, entre dar la espalda al trabajo y la cara a lo que llegue julando a la primera de cambio,el presidente de Francia quiso cortar por lo sano. E hizo bien.

Otro ciudadano rumano,
en plana tarea laboral,
desarrollada en cualquier mercado

Pero resulta que le están arreando de lo lindo. Las asociaciones esas de humanismo; la Comunidad Europea y otros, que se empeñan en no ver la realidad del porqué de tales expulsiones, por eso salen y le llaman racista, que comete violación del derecho de todo ciudadano a circular libremente; esto es, que tales gitanos rumanos, son, por lo que parece, ciudadanos ejemplares, trabajadores de estrella a estrella, que dejan atrás a los japoneses y son fieles cumplidores del deber cívico y del respeto a todo lo habido y por haber, además de otras virtudes como las de ser honorables ciudadanos, que viven del trabajo, del respeto y de la concordia, del ejemplo; de la humildad, castidad y la colaboración para con los demás...Y claro, tantas virtudes no supo verlas el Presidente de la República de Francia.

Se ve que el único que no sabe por donde anda es Sarkozy.Los demás,en aras de la solidaridad, la justicia social e incluso divina, defienden a los gitanos rumanos. Por eso, porque son ciudadanos libres--eso, libres---, virtuosos, de vagos nada, de maleantes, tampoco; nada de eso. Esos no viven de la mendicidad ni de otras zunas; viven de la abnegación por el trabajo;no forman clanes ni ocupan propiedades ajenas. Son ejemplares en todas partes. Y siendo tanto, extraña que hasta en su propio país no tengan cabida.La verdad es que extraña,en efecto. Gente así, por tanto, no ha de chocar que no les falten defensores, como no les faltan.

Ni en los peores años de España,
tras la guerra civil, la gente tenía
tanta dignidad como los ciudadanos rumanos,
para vivir de los demás...

Y extraña también que tantos defensores de ese buena gente no les cobijen en sus domicilios, en sus propiedades, en sus municipios, en sus regiones. Que bien lo podían hacer y dejarse de pedir milagros a los gobiernos de los países que no quieren tener esa gente. Esa gente, sí, de tan ejemplar conducta y vida tan buena, que a buen seguro mejorarían los modos, los hábitos y las costumbres de tales países, de los cuales les quieren echar, sin tener en cuenta lo mucho y bueno que podrían hacer en ellos y por ello, y por la gente nativa y por el desarrollo y la cultura, el progreso, el trabajo y el desarrollo industrial.Y por la moral y la salud, y por todo eso, oiga, que podrían brindar, dar y ofrecer si no fueran expulsados como una plaga, que de plaga, nada, oiga, de plaga nada. Son ciudadanos con los mismos derechos que el más pintado.

Así que, Sarkozy, a ver si aprendes, majo: que a esa gente no hay que expulsarla.

SARKOZY TIENE RAZON; LOS DEMÁS NON

Niños rumanos,bien adiestrados
en lo que ha de ser la vida de mayores.

Venimos asistiendo a un escandaloso clamor contra el presidente de la República Francesa Nicolás Sarkozy por su decisión de expulsar a los gitanos rumanos. Organizaciones diversas y diversa clase de gente, protestan, gritan y exigen que se anulen tales expulsiones. Lo cual es extraño. Y extraña a quien más y a quien menos. ¿Que clase de gente es la que expulsa el presidente de Francia? Pues son gitanos rumanos (y parece que algunos búlgaros), pero no por el hecho de ser simplemente gitanos ni rumanos, sino por ser delincuentes, gentes sin trabajo, que de haberlo, lo rechazan; son clanes que viven del modo que la inmensa mayoría rechaza;de la delincuencia, del pillaje, de la mendicidad y de otras formas sobradamente conocidas e igualmente censurables.

En mitad de la calle,mostrando
las llagas físicas y morales de la
raza a la que pertenecen

Ningún país desea gente así, ni propia ni de acogida. A la propia, hay que intentar erradicarla, pero a la ajena, ya que no tiene ningún propósito de enmienda, hay que expulsarla.y eso ha hecho Sarkozy.Y no sin razón. Le sobra a él tanta razón para hacer lo que hace, como a esas asociaciones o enegés, grupos o como se llamen les falta para protestar las decisiones del presidente de intentar limpiar el suelo francés de aquello que lo corrompe.
Tres o cuatro lustros atrás nos comunicó Miguel Rionda desde Suiza algo así : que, "dado que se estaba produciendo un éxodo de rumanos hacia España, que nos pusiéramos en lo peor.Que los rumanos y sobre todo, los gitanos rumanos eran una plaga que no respetaba nada." Vivían del pillaje y de la mendicidad, que era para ellos un negocio...Y así, es de ver en cualquier población, de qué modo actúan. Hemos sido testigos de la osadía y desvergüenza de algunos de ellos, que sin el más mínimo respeto al dolor ajeno, deambulaban entre las personas amigas de algún fallecido, que asistían al entierro. Pedían con la mano extendida, metiéndose entre los corrillos de familiares, y si no les atendías, te tocaban repetidas veces en los brazos para hacerte ver que estaba, allí, pidiendo. Y no se inmutaban. De un grupo daban la vuelta e iban a otro...

Vale toda edad, niños,mozos y ancianos.
La cuestión está en vivir de lo que
siempre han vivido.del trabajo de la mendicidad.

Incluso a los propios familiares del difundo, que se encontraban al duelo, osaban presentarse ante ellos, con la mugrienta mano extendida, pidiendo que les dieran alguna moneda.Ante el pasmo de los familiares directos del fallecido, que no atinaban a comprender aquel acto, los mozalbetes, de ambos sexos, insistían... Ante semejante descaro, hubo quien les instó a que se fueran, pero no se iban. Se hacían los remolones o que no entendían lo que se les decía. Fue entonces que les forzaron a irse, expulsándoles, pero como si nada, a los dos minutos, volvían por el otro extremo, a sus andanzas. Lo que más extraña de estas cosas, tan conocidas y sabidas, es que las autoridades españolas parezcan no saber nada de nada. Pasar de esto y de otras cosas tan repudiables.

La aptitud plausible del presidente de la República Francesa, señor Sarkozy, de expulsar a tales gitanos rumanos --mucho peores que sus primos hermanos en Iberia-- origina para España el aumento de la plaga que aquí se viene padeciendo con estas gentes. Francia los expulsa.Pero como España los acoge, porque entran como Pedro por su casa,¡hale!, para España, que aquí son los amos.Aquí nadie les dice nada, ni les advierte de nada.Y aquí, como hasta los medios de comunicación, prensa, radio y televisión, les dedican espacios y atenciones, ¡nunca la vieron más gorda! ¡Cómo en España ni hablar!