Más de una vez se ha hablado de la delincuencia. Y hemos manifestado que no es que los españoles vayamos con aureola de santidad ni leches parecidas.Pero es que --mírenlo como les dé la gana-- lo que está ocurriendo en España con las delincuencia extranjera es para ponerse a temblar. Hoy mismo la prensa nos da en primera página que la Policía desarticula una banda de rumanos, cuyas acciones, además del robo, retratan una actividad violenta e inhumana. El hecho tuvo lugar en Asturias..
Desde hace años España está sufriendo una plaga procedente del Centro de Europa peor que la peste. Y de esta plaga, los rumanos van en cabeza.
Y no vengan conque no son todos los rumanos,y que también los hay honrados, que eso no se discute. Se discute que los que a diario, aquí o ahí o más allá, son detenidos una o diez veces, por delincuentes, la mayoría sí son rumanos.
Y no vengan tampoco diciendo que España también fue emigrante. Que los españoles, que se sepa, no iban en bandadas a delinquir, ni vivían sin justificar un trabajo:ni vivían de la mendicidad, ni de otras razones sobradamente sabidas. Y en cambio en España estamos sufriendo una auténtica plaga de maleantes, crápulas e indeseables.
Y de esta ralea, los rumanos van a la cabeza.
Que hablen, pues nuestras autoridades. Todas y todos. Políticos, policiales, judiciales... Esos señores que legislan, esos señores que dan tanta valía al delincuente como al honrado. Todo por esos argumentos de que, mientras no se demuestre lo contrario, todos gozan del beneficio de la presunción de inocencia...
Pero mientras tanto,pasa lo que pasa y ocurre lo que ocurre.
Y por supuesto, no se nos ocurra decir que la justicia es un cachondeo--que no lo decimos,no, por si acaso-- pero acuérdense del alcalde aquel que tal dijo, como le llovieron hostias después, para que otra vez sepa con quién estaba tratando....
Y acuérdense del padre de una de las chicas asesinadas en Alcacer, que dolido ante la nula efectividad de nuestros responsables de leyes, es quien,para que no dude de la justicia, va a ser castigado o multado o sancionado...
...Que hablen las conciencias y las mesuras
Acuérdense de cientos y un casos en que ante la insolvencia del facineroso, quien más de cuatro veces pagó los platos rotos, además de perderlos, ha sido el asaltado...
Qué hablen los hechos y los resultados...
Acuérdense de que la justicia es en España una de las instituciones peor valoradas. Y, hombre, ¿qué quieren que les diga? ¿Que me extraña siendo tan efectiva como es?
Ustedes, todos los que constituyen los diversos poderes en España, digan si hay o no hay una excesiva delincuencia procedente de otros países de la Europa Central, o de países situados, antes, tras el telón de acero. Y otra delincuencia, entre amparada y protegida por estar constituida por bandas juveniles, que bien protegidos están apenas llegan a España...
Que hablen quienes sabiendo todo lo que está ocurriendo, argumentan y teorizan para justificar lo que no debiera ocurrir.
La democracia, no sólo ha de ser libertad...La democracia, también debe tener rigidez y no dejar hacer a quienes están fuera de las leyes. O pasan por encima de ellas.O les importa un comino.
Que hablen quienes pueden hacerlo. Los que ven lo que ocurre y no los que se sientan molestos porque, siendo lo que son y teniendo el poder que tienen, son cuestionados en su eficacia contra tanta crapulería como en España estamos padeciendo.Menos leyes y más efectividad.Las leyes es papel mojado si no se ejecutan con eficacia.
El miedo está instalado en nuestras poblaciones.El miedo nos hace decir lo que se dice. Y esperamos que ese miedo que nos atenaza a los ciudadanos y que señala a las leyes y a las autoridades como poco efectivas contra tanta relea violenta e indeseable a la que no se corta por lo sano, nos exonere del dedo acusador de la ley y de la justicia...porque ya sería lamentable que por decir lo que se dice, venga encima la justicia con su ley y nos ponga el pie encima...
Desde hace años España está sufriendo una plaga procedente del Centro de Europa peor que la peste. Y de esta plaga, los rumanos van en cabeza.
Y no vengan conque no son todos los rumanos,y que también los hay honrados, que eso no se discute. Se discute que los que a diario, aquí o ahí o más allá, son detenidos una o diez veces, por delincuentes, la mayoría sí son rumanos.
Y no vengan tampoco diciendo que España también fue emigrante. Que los españoles, que se sepa, no iban en bandadas a delinquir, ni vivían sin justificar un trabajo:ni vivían de la mendicidad, ni de otras razones sobradamente sabidas. Y en cambio en España estamos sufriendo una auténtica plaga de maleantes, crápulas e indeseables.
Y de esta ralea, los rumanos van a la cabeza.
Que hablen, pues nuestras autoridades. Todas y todos. Políticos, policiales, judiciales... Esos señores que legislan, esos señores que dan tanta valía al delincuente como al honrado. Todo por esos argumentos de que, mientras no se demuestre lo contrario, todos gozan del beneficio de la presunción de inocencia...
Pero mientras tanto,pasa lo que pasa y ocurre lo que ocurre.
Y por supuesto, no se nos ocurra decir que la justicia es un cachondeo--que no lo decimos,no, por si acaso-- pero acuérdense del alcalde aquel que tal dijo, como le llovieron hostias después, para que otra vez sepa con quién estaba tratando....
Y acuérdense del padre de una de las chicas asesinadas en Alcacer, que dolido ante la nula efectividad de nuestros responsables de leyes, es quien,para que no dude de la justicia, va a ser castigado o multado o sancionado...
...Que hablen las conciencias y las mesuras
Acuérdense de cientos y un casos en que ante la insolvencia del facineroso, quien más de cuatro veces pagó los platos rotos, además de perderlos, ha sido el asaltado...
Qué hablen los hechos y los resultados...
Acuérdense de que la justicia es en España una de las instituciones peor valoradas. Y, hombre, ¿qué quieren que les diga? ¿Que me extraña siendo tan efectiva como es?
Ustedes, todos los que constituyen los diversos poderes en España, digan si hay o no hay una excesiva delincuencia procedente de otros países de la Europa Central, o de países situados, antes, tras el telón de acero. Y otra delincuencia, entre amparada y protegida por estar constituida por bandas juveniles, que bien protegidos están apenas llegan a España...
Que hablen quienes sabiendo todo lo que está ocurriendo, argumentan y teorizan para justificar lo que no debiera ocurrir.
La democracia, no sólo ha de ser libertad...La democracia, también debe tener rigidez y no dejar hacer a quienes están fuera de las leyes. O pasan por encima de ellas.O les importa un comino.
Que hablen quienes pueden hacerlo. Los que ven lo que ocurre y no los que se sientan molestos porque, siendo lo que son y teniendo el poder que tienen, son cuestionados en su eficacia contra tanta crapulería como en España estamos padeciendo.Menos leyes y más efectividad.Las leyes es papel mojado si no se ejecutan con eficacia.
El miedo está instalado en nuestras poblaciones.El miedo nos hace decir lo que se dice. Y esperamos que ese miedo que nos atenaza a los ciudadanos y que señala a las leyes y a las autoridades como poco efectivas contra tanta relea violenta e indeseable a la que no se corta por lo sano, nos exonere del dedo acusador de la ley y de la justicia...porque ya sería lamentable que por decir lo que se dice, venga encima la justicia con su ley y nos ponga el pie encima...
1 comentario:
Es cierto que vivimos una época en la que parece que hay mucha delincuencia;es cierto que a veces parece que los delincuentes tienen todos los derechos,en detrimento de las víctimas que tienen que demostrar que tiene razón.Es cierto lo que dice Albino,y por cierto no lo voy a discutir.
Pero tambien es cierto que hay cosas buenas,yo diría que muy buenas y que siguiendo la tendencia que tenemos de ver solo lo incorrecto,no nos paramos a apreciar esas cosas.Alguien dijo que: los pecados escriben la historia;el bien es silencioso.
Y eso es un poco lo que nos está pasando;que vemos la avalancha de delincuentes que se nos viene encima,y quizá eso nos obstruya ver lo bueno que tenemos.
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