Por fortuna, uno no puede leer todo lo que se escribe. Y menos, todos los disparates que se lanzan a rodar. No obstante, no nos libramos de tremendos tropezones. Uno de los últimos es el que origina la secretaria del PP, María Dolores de Cospedal, secretaria general del PP, quien es muy libre de pedir a los suyos "valentía y gallardía", pero que diga que "hay que echar a Zapatero a todo costa porque es el culpable de lo que ocurre en el mundo", no deja de ser una tremenda irresponsabilidad.O una aseveración ilógica e impropia de quien detenta tan alto cargo en el partido que quiere acceder al Gobierno de España. Si de señalar se trata, también ella puede ser señalada de incompetencia. Y sembrar vientos que le originarán tempestades...
Bueno, pues tanto uno como otro, Aguirre como Aznar, Aznar como Aguirre, cada vez que levantan la voz originan euforia en los suyos y desagrado en los que no lo son.Y levantando la voz y alegrando a los del gremio, ¿es por la sapiencia de sus palabras? Ni mucho menos. Es por salirse de madre en lo que dicen, que además corean los de El Mundo, y los de la COPE y de estos medios, más que nadie, Pedro J. Ramírez y Federico Jiménez de Losantos, que, en sus disertaciones, si con las palabras pudieran incendiar al Gobierno socialistas y, sobre todo, al presidente Rodríguez Zapatero, a estas horas estaríamos pisando cenizas y respirando humo...
Lo hemos escuchado días atrás. El ínclito que fue de las Azores, de lo que, como español, nunca se arrepintió de la imagen y de lo que, como consecuencia, vino con la invasión a Irak,viene ahora disertando con metáforas futboleras para referirse a Mariano Rajoy, al que, tras haberle elevado al cargo que ocupa, ahora lo defenestra públicamente, sin nombrarle, pero le pone a caldo y lo acusa de blandengue, o así, porque él, Josemari, cuando salía a dar la batalla, lo hacía para ganar, no para empatar o perder, como en el fútbol y no como, por supuesto advierte, hacen algunos...¡Pobre Mariano! Ya ve cómo tiene el terreno de juego.Enfangado.
Y, por si fuera poco, Esperanza Aguirre tampoco parece tener mucha confianza en que, si sigue Mariano Rajoy en el puesto que ocupa, logre jamás llegar a La Moncloa, que es lo que de verdad desean ella y otros como ella.
De tal modo están las cosas entre ellos que, aunque lo nieguen o lo disimulen, cuando no viene Pedro, va Juan y cuando no, van y vienen unos y otros con sus propias apetencias. Ahora, el presidente del PP en Andalucía, Javier Arenas, también empieza a estar en cuarentena. Han surgido grupos de su propio partido que piden su dimisión.
Ustedes, por tanto, digan lo que quieran, pero uno, que ni es ni se le espera en este teje-maneje de sucesos, intereses, mangoneos e intrigas, piensa que, al verles la imagen, la voz que les corresponde es sin duda mucha más grave que lo aquí expuesto. Y eso que estamos en otro mundo ajeno al de la caridad cristiana de Rouco Varela, Losantos, Pedro Jota, y los súbditos que les asisten, que no son pocos, ni mancos, aunque sí, a la conciencia y a la dignidad, sordos y mudos.Y fieles al cielo, como César Vidal y la historia, como Pío Moa. Y en torno, los neocón de la España imperial, los irredentos y los que ven, a pesar de tantos años ausentes de la vida, presentes a Franco y a otros como él.
Esto es, que la voz de la imagen, bien podía ser más bronca acerca de los que estamos viendo y otros más que se puede ver todavía, que más hay y por ahí andan.
"Os lo digo yo: del mal del mundo,
el culpable es Zapatero. Hay que echarlo."
Aguirre y Aznar, Aznar y Aguirre, dos líderes del PP, dos, y ambos, según nos parece, de rostro tan cautivador que embelesa mirarlos...Casi tan angelical como el de sor Maravillas. Y, vaya usted a saber, a lo mejor haciendo tantos milagros como la protegida de Bono, no obstante que no consiguió ponerle una placa en el Congreso a tal monja, de tendencia política conservador.el culpable es Zapatero. Hay que echarlo."
Tal para cual.Mucho verbo,
pero en informar, protervo.
pero en informar, protervo.
Bueno, pues tanto uno como otro, Aguirre como Aznar, Aznar como Aguirre, cada vez que levantan la voz originan euforia en los suyos y desagrado en los que no lo son.Y levantando la voz y alegrando a los del gremio, ¿es por la sapiencia de sus palabras? Ni mucho menos. Es por salirse de madre en lo que dicen, que además corean los de El Mundo, y los de la COPE y de estos medios, más que nadie, Pedro J. Ramírez y Federico Jiménez de Losantos, que, en sus disertaciones, si con las palabras pudieran incendiar al Gobierno socialistas y, sobre todo, al presidente Rodríguez Zapatero, a estas horas estaríamos pisando cenizas y respirando humo...
"Hay que salir a ganar,
dice a la Esperanza, Aznar
dice a la Esperanza, Aznar
Lo hemos escuchado días atrás. El ínclito que fue de las Azores, de lo que, como español, nunca se arrepintió de la imagen y de lo que, como consecuencia, vino con la invasión a Irak,viene ahora disertando con metáforas futboleras para referirse a Mariano Rajoy, al que, tras haberle elevado al cargo que ocupa, ahora lo defenestra públicamente, sin nombrarle, pero le pone a caldo y lo acusa de blandengue, o así, porque él, Josemari, cuando salía a dar la batalla, lo hacía para ganar, no para empatar o perder, como en el fútbol y no como, por supuesto advierte, hacen algunos...¡Pobre Mariano! Ya ve cómo tiene el terreno de juego.Enfangado.
Y, por si fuera poco, Esperanza Aguirre tampoco parece tener mucha confianza en que, si sigue Mariano Rajoy en el puesto que ocupa, logre jamás llegar a La Moncloa, que es lo que de verdad desean ella y otros como ella.
De tal modo están las cosas entre ellos que, aunque lo nieguen o lo disimulen, cuando no viene Pedro, va Juan y cuando no, van y vienen unos y otros con sus propias apetencias. Ahora, el presidente del PP en Andalucía, Javier Arenas, también empieza a estar en cuarentena. Han surgido grupos de su propio partido que piden su dimisión.
--Tú, no te precipites.Espera.
Sé cauta, que se así se alcanza,
te lo digo yo, Esperanza,
que te honre la bandera
Sé cauta, que se así se alcanza,
te lo digo yo, Esperanza,
que te honre la bandera
Ustedes, por tanto, digan lo que quieran, pero uno, que ni es ni se le espera en este teje-maneje de sucesos, intereses, mangoneos e intrigas, piensa que, al verles la imagen, la voz que les corresponde es sin duda mucha más grave que lo aquí expuesto. Y eso que estamos en otro mundo ajeno al de la caridad cristiana de Rouco Varela, Losantos, Pedro Jota, y los súbditos que les asisten, que no son pocos, ni mancos, aunque sí, a la conciencia y a la dignidad, sordos y mudos.Y fieles al cielo, como César Vidal y la historia, como Pío Moa. Y en torno, los neocón de la España imperial, los irredentos y los que ven, a pesar de tantos años ausentes de la vida, presentes a Franco y a otros como él.
Aunque sonrían los dos,
ni Esperanza ni Rajoy
a menos a día de hoy,
se profesan buen amor...
ni Esperanza ni Rajoy
a menos a día de hoy,
se profesan buen amor...
Esto es, que la voz de la imagen, bien podía ser más bronca acerca de los que estamos viendo y otros más que se puede ver todavía, que más hay y por ahí andan.
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