Por si hay quien no ha visto a Franco en su estado más
puro, obsérvenlo aquí, con
su racial "Arriba España"...
La metálica voz de Fernández de Córdoba, ufano de lo que decía por ser de los vencedores, dijo entre el 30 de marzo y 1 de abril lo que el Caudillo, desde su Cuartel General de Burgos, había escrito: "En el día de hoy,cautivo y desarmado el Ejército rojo, han alcanzado los tropas nacionales sus últimos objetivos.La Guerra ha terminando.- Firmado: El Generalísimo Franco.- Burgos,1 de abril de 1939."
Y aquello que pudo ser una paz deseada, ni mucho menos lo fue.Allí, a partir de entonces, en vez de buscar por medio de la paz, la reconciliación y la concordia, empezó una persecución y un acoso despiadado contra los vencidos; el ensañamiento y la más dura de las represiones fue lo cotidiano de la vida. Le persecución no tuvo límites. Y por lo mismo, no había piedad ni conmiseración para nadie. Familias enteras, incluidos niños, desaparecieron. Los hombres, apresados, tras el final de la guerra, formaban campos de concentración, de trabajadores, de prisioneros...Otros, estaban en el exilio, o desaparecidos...
Y mientras tanto, los eufóricos del falangismo, pistola al cinto y camisa azul, cometían tropelías, invadían hogares, maltrataban todo aquello que se les pusiera por delante. Las denuncias más inverosímiles eran puestas en práctica, las gentes eran detenidas...Y muchas de las detenidas, fueron desaparecidas, sacadas de las cárceles y abatidas en cualquier parte....De las cárceles y de las casas, de las pobres y míseras casas..
¿Había terminado la guerra...? La guerra había terminado para los que la ganaron; los que la perdieron, siguieron en sufrimiento y en persecución constante; siguieron víctimas de la saña y del oprobio de los que hablaban de Dios, mientras la Iglesia llevaba bajo palio al Caudillo, le bendecía y le glorificaba. ¿Y todo "por la gracia de Dios"? Pasaron 7o años de aquel día 1 de Abril, y tras aquella fecha, todavía tendrían que pasar muchos años más para que la economía de los trabajadores, como tales mejorase un poco. Tuvo que llegar el año de 1962, y haberse organizado huelgas y manifestaciones en les cuencas mineras para que los trabajadores vi
esen mejorada su situación económica.
Pero lo pagaron caro. Hubo destierros, cárceles, castigos, torturas y, los mineros jóvenes, fueron forzados a cumplir el Servicio Militar, donde algunos también sufrieron represión.
Si bien es verdad que la República Argentina envío barcos llenos de cereales y carnes, no es menos verdad que estos buques no llegaban a España; eran desviados y remitidos a Alemania, que así pagaba el Generalísimo la ayuda hitleriana recibida. Y aunque aquí se hubiesen suprimido las Cartillas de racionamiento, es como si no se hubieran suprimido: no había dinero para pagar siquiera el pan, que no era blanco, era de legumbres; ni había, además qué comprar.
70 años han pasado del final de aquel levantamiento que tanta sangre derramó y tanta miseria originó. Casi 40 años de dictadura, donde fueron anulados muchos derechos que la República había otorgado, incluso el voto a las mujeres, que la España nacionalcatólica también suprimió. Igual que suprimió miles de maestros, y la libertad de reunión, de asociación y de expresión.
Y tras la muerte del elegido por la Gracia de Dios, España, dos años después de tal óbito, entra en la estancia europea, cuenta con una Constitución , que habida cuenta que nada había otorgado el franquismo, nos supo a mucho, pero se fue viendo al pasar el tiempo, que nuestra actual Constitución democrática es incompleta.Le faltan muchos resortes, muchos derechos y recursos para ser una verdadera Constitución. Viendo muchos resultados y muchas actuaciones de nuestros políticos, tal parece que llevamos un tremando lastre detrás...O que la sombra del Caudillo es alargada como una soga...
70 años han pasado. Y ¡cuánto hay que hablar y hacer, revisar y mejorar todavía! ¡Cuánto...!
Y aquello que pudo ser una paz deseada, ni mucho menos lo fue.Allí, a partir de entonces, en vez de buscar por medio de la paz, la reconciliación y la concordia, empezó una persecución y un acoso despiadado contra los vencidos; el ensañamiento y la más dura de las represiones fue lo cotidiano de la vida. Le persecución no tuvo límites. Y por lo mismo, no había piedad ni conmiseración para nadie. Familias enteras, incluidos niños, desaparecieron. Los hombres, apresados, tras el final de la guerra, formaban campos de concentración, de trabajadores, de prisioneros...Otros, estaban en el exilio, o desaparecidos...
Y mientras tanto, los eufóricos del falangismo, pistola al cinto y camisa azul, cometían tropelías, invadían hogares, maltrataban todo aquello que se les pusiera por delante. Las denuncias más inverosímiles eran puestas en práctica, las gentes eran detenidas...Y muchas de las detenidas, fueron desaparecidas, sacadas de las cárceles y abatidas en cualquier parte....De las cárceles y de las casas, de las pobres y míseras casas..
¿Había terminado la guerra...? La guerra había terminado para los que la ganaron; los que la perdieron, siguieron en sufrimiento y en persecución constante; siguieron víctimas de la saña y del oprobio de los que hablaban de Dios, mientras la Iglesia llevaba bajo palio al Caudillo, le bendecía y le glorificaba. ¿Y todo "por la gracia de Dios"? Pasaron 7o años de aquel día 1 de Abril, y tras aquella fecha, todavía tendrían que pasar muchos años más para que la economía de los trabajadores, como tales mejorase un poco. Tuvo que llegar el año de 1962, y haberse organizado huelgas y manifestaciones en les cuencas mineras para que los trabajadores vi
esen mejorada su situación económica.Pero lo pagaron caro. Hubo destierros, cárceles, castigos, torturas y, los mineros jóvenes, fueron forzados a cumplir el Servicio Militar, donde algunos también sufrieron represión.
Estampa trágica de la España
franquista, que hemos conocido
y padecido.Miedo, hambre,
miseria,,,
Sarcasmo e ironía. Hipocresía y cinismo. Menuda España aquella nacido del 18 de Julio, aquella que se decía nacionalcatólica, que obligaban a ir a misa, obligaban a trabajar diez horas en la mina, y una hora "para el Estado", una hora gratis, por supuesto. Y por si todo fuera poco, todo estaba racionado, absolutamente todo: el pan, el arroz, el aceite, el azúcar...El hambre era constante y la tragedia permanente. Hasta 1952 no fueron suprimidas las Cartillas de racionamiento.Habían pasado 13 años. Se trabajaba prácticamente gratis, y no había qué comer.El hambre era abrumadora. Entonces, trabajando todos medio gratis tantos años,¿que se hizo de aquel esfuerzo?...¿A quién benefició tanto sacrificio...?franquista, que hemos conocido
y padecido.Miedo, hambre,
miseria,,,
Si bien es verdad que la República Argentina envío barcos llenos de cereales y carnes, no es menos verdad que estos buques no llegaban a España; eran desviados y remitidos a Alemania, que así pagaba el Generalísimo la ayuda hitleriana recibida. Y aunque aquí se hubiesen suprimido las Cartillas de racionamiento, es como si no se hubieran suprimido: no había dinero para pagar siquiera el pan, que no era blanco, era de legumbres; ni había, además qué comprar.
70 años han pasado del final de aquel levantamiento que tanta sangre derramó y tanta miseria originó. Casi 40 años de dictadura, donde fueron anulados muchos derechos que la República había otorgado, incluso el voto a las mujeres, que la España nacionalcatólica también suprimió. Igual que suprimió miles de maestros, y la libertad de reunión, de asociación y de expresión.
Y tras la muerte del elegido por la Gracia de Dios, España, dos años después de tal óbito, entra en la estancia europea, cuenta con una Constitución , que habida cuenta que nada había otorgado el franquismo, nos supo a mucho, pero se fue viendo al pasar el tiempo, que nuestra actual Constitución democrática es incompleta.Le faltan muchos resortes, muchos derechos y recursos para ser una verdadera Constitución. Viendo muchos resultados y muchas actuaciones de nuestros políticos, tal parece que llevamos un tremando lastre detrás...O que la sombra del Caudillo es alargada como una soga...
70 años han pasado. Y ¡cuánto hay que hablar y hacer, revisar y mejorar todavía! ¡Cuánto...!
3 comentarios:
Compañero Albino: Digas lo que digas, todavía se puede decir mucho más.Por ejemplo. ¿qué se hizo del dinero de la República que Franco y sus militares requisaron y anularon y, al anularlo, dejaron en la más completa ruina a los españoles perdedores, mientras que los vencedores crearon la nueva moneda, de la que dispusieron antes y más que los demás? Aquella fue otra vileza del franquismo. Y es verdad, tienes razón,el final de la guerra no supuso el comienzo de la paz, sino de una enconada persecución de miles de familias, a las que condenaron a toda clase de suplicios, exilio y muerte.Si a ti te agobia la Iglesia, cómplice de tantas iniquidades, a mi me envenena. Y ya la ves, sigue ahí, todavía ahora, levantando la voz anatematizadora y amenazando incluso al Gobierno. Ella, esta Iglesia católica, si pudiera, implantaría de nuevo el perverso Santo Oficio de la Inquisición para ponernos otra vez el pie sobre el cuerpo para salvarnos el alma...
Verás, me temo que aunque pasen otros 70 años, la alargada sombra del llamado Caudillo "por la gracia de Dios", va a seguir sobre este país llamado España todavía. Tal fue su negrura que no ha de extrañar que su sombre perdure, como el de la Inquisición.
En el día de hoy"cautivo y desarmado el ejércto rojo".
¿No se os respiga el cuerpo cuando se escucha esto de nuevo?
Es decir además de desarmados,"cautivos".Prisioneros diría yo,para que todos lo entendieran.
Y así les gustaría vernos ahora después de 70 años,a tod@s aquell@s que no comulgamos con sus ideas.
Entiendo el resentimiento y el dolor, pero ya va siendo hora de mirar hacia adelante. No podemos estar otros 70 años lamentandonos. Ademas, la Republica tampoco fue una leccion de honestidad, honradez y tolerancia. Recuerdo iglesias quemadas, monjas violadas, curas colgados (Bobadilla), las checas de Altadell. No se si es comparabla, supongo que no, pero la historia se escribe en dos direcciones.
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