EL MONAGUILLO QUE SE CREYO CARDENAL

Confieso mi pecado. Soy admirador y seguidor de El plural, y de su director Enric Sopena, así como de Iñaki Gabilondo, presentador y comentarista de la 4. Lo digo por si ello constituyera delito.
Al respecto de Iñaki Gabilondo, anoche aseveró que "Rajoy no puede con el PP. Es imposible que pueda con España". ¿Esta fuera de sí con esta aseveración o dice más verdad que un santo? Desde luego, la respuesta afirmativa es la segunda.
Con todo y con ello, fue en la noche del marte 13, cuando fue su comentario digno de figurar en las antologías de la certeza, la mesura y la verdad. Habría que enmarcar el comentario.
Pueden ustedes creerme.Hay armas de destrucción
masiva.Y eso hay que evitarlo- dijo Aznar en el Congreso.

Se refirió a la amistad de Bush y Aznar.Al respecto -y tal como se mostraba el aguerrido español y tantas veces se mostró, según era apreciado por nosotros--hizo un retrato como nadie había hecho del tercero de las Azores. Retrato de su idiosincrasia y de su alma, transfigurada a la actuación y a la cara. "El monaguillo que se creyó cardenal", pero, por supuesto, no salió de monaguillo que levantaba la casulla al sacerdote de la irascibilidad...
La imagen lo dice todo.
¡Que honor si hubiera gran señor!

LOS POETAS AL CANTO

Aznar,
el monaguillo
que se creyó cardenal..."
El que con Bush y los suyos
y en la boca un Partagás,
se imaginó ser más grande

que en la India un marahajá
y que, como rey de bastos

y amigo del Bush fatal,

puso los pies en la mesa,
como un zote, a descansar.

Aznar, sombrío y ufano.
bisagra sin engrasar,
con su amigo el gran cetrino,
el Bush de armas tomar,
el astuto Tony Bleir
formaron la trinidad
de la ceguera y
del odio
para mentir y engañar
y en nombre de males leyes

invadir un pueblo...más.

Y Aznar,

tercero de las Azores,

vino a España a monsergar:
-pueden ustedes creerme.
dijo al Congreso, al hablar--,
que hay armas
de fuerza tal,
que si no las destruimos
nos destruirá Sadam...

El resultado ya es visto

--Bleir, Bush, amén de Aznar

mentían--mintieron siempre
a cual más mentía más...
Pero el inglés y el u
saco
reconocieron su errar,

pues ninguno encontró
armas
en ningún sitio...
Y Aznar,
erre que erre seguía
sin disculparse, al hablar...

Al contrario,

adusto y paso marcial,
cada vez que intervenía
en foros hablaba mal
de España y de su Gobierno,
con lo cual,
seguía aumentando el vicio
de haber invadido a Iraq...
Poner los pies en la mesa,
eso sólo lo hace Aznar,
que ahí comenzó la crisis
que llegó con él detrás,

vestida de prepotencia
ira, saña, paro y mal...

Mas señor de tanta altura
y tan alto pedestal---
bien habló texano en USA
y en privado catalán....
Y entre hablar de tanto y cuanto

y otras veces mascullar,
dilapidó el patrimonio
del Estado patriarcal...

Eso sí, como un rey mago
de intocable majestad,

casó a la bella durmiente
--hija al fin para casar--
con el dios de las finanzas
a la luz del Escorial...

Aznar,

el monaguillo que un día

se creyó ser cardenal...

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