AÑO NUEVO...?




Pese --al menos aquí, en España-- a tanto deseo de felices fiestas, felices pascuas y felicidad por arriba y por abajo, sea de buena fe o de fe disfrazada de hipócrita sonrisa, lo cierto es que, aquí o allá, la felicidad está a precio de oro, pero pagada con sangre, llanto y tragedia.
Y a todo esto, no se sabe desde cuando, pero tal vez desde antes de Adán y Eva, el mundo está patas arriba. No hay dios que lo entienda. Incluso, para nosotros, este mundo que nos cerca de religión romana, se eleva en un toma y daca que no somos capaces de asimilar pese a nuestra mejor voluntad. Estamos en fin de año, acaban de pasar las navidades, fechas en que la Iglesia celebra el nacimiento (sin fecha exacta del natalicio) de Jesucristo. Tal efemérides es de celebrar. Y se celebra. ¿Y Para qué? ¿No se celebra, después, con geremíacas procesiones las distintas estaciones del prendimiento de Jesús y posterior crucifixión?...

Cada año viene ocurriendo lo mismo: músicas, luces, palabras, comilonas,celebraciones, rituales y total ¿para qué? ¿Hay paz en el mundo? La Iglesia misma ¿hace acto de contrición alguna? No. La Iglesia sigue obviando quién le hizo la puñeta a Cristo, dentro y fuera del templo. Y tantos años después, los que se han erigido en sus representantes, tiran más a acumular bienes y riquezas sin cuento que a dar ejemplo de espiritualidad, paz y perdón. Y que eso de la caridad cristiana Es verdad. Pero no. La Iglesia, como dejó patente una vez más este pasado domingo, ha vuelto a salir a la calle. Para enfrentarse al Gobierno español.

Así, pues, en Navidad o Año Nuevo, con un mundo que está que lo llevan los demonios, todo sigue igual que siempre estuvo. Y no vamos a transcribir nuestro poema "Navidad laica", que comienza

"¿Navidad y Buena Nueva?
Puede ser, pero después
al Mesías de la cueva
le clavan manos y pies",

si no que transcribiremos "El Año Nuevo" de Alfonso Camín, escrito en 1914, cuando el gran poeta tenía 24 años, estaba en Cuba y, encargado por el director de "El Diario de la Marina", Nicolás Rivero, de un trabajo extra para un número especial del diario que iba a dedicar al nuevo año...,
Alfonso Camín, poeta desde la cuna y orlado por el laurel de Apolo, no hizo ningún tema al uso, donde la prosa ocupa espacio y su dedo se pone poco sobre la llaga que el mundo padece. Escribió un soneto, "El Año Nuevo", que admiró al director, quien decidió que ocupase toda la primera página del periódico. El éxito fue total y al aplauso unánime.
Alfonso Camín, inconfundible. a su llegada del exilio, 1967 en el Puerto de El Musel
Lo que el soneto decía - y dice -, se puede decir ahora mismo. El mundo no ha mejorado.Todo sigue de mal en peor, pese a cantos gregorianos y prédicas que no abren surcos para mitigar el hambre den el mundo, amén de convertir las espadas en arados y evitar que haya pueblos que se mueren de hambre y sea la miseria permanente. Con el despilfarro y el gasto que hacen los países ricos en armamento, se podría conseguir -- y sobraba todavía-- que el mundo entero viviese con holgura...Pero no es así. Y esa felicidad ¿es posible que sea, cuando el drama es tan abrumador por todas partes? Veamos lo que dice el poema de Alfonso Camín "El Año Nuevo":

Bien vayas, Año Viejo, segador implacable,
que te vas de los campos con la mies de la vida,

con tu fardo de crímenes, tu figura execrable
y aún blandiendo en tus manos la guadaña homicida.

Nace el año, heredero de los cetro del Mundo,

y en el hondo sarcasmo de una boche de luna,
cuando ruge a sus plantas el rencor iracundo,
ve que tienen una enorme calavera por cuna.

La Locura y el Crimen se han vestido de gala;

deja el año que vuele la impecable paloma
y un bautismo de sangre por su frente resbala...

Luce el mundo, a manera de un festín nunca visto:

nuevamente tornamos a los tiempos de Roma
y los pueblos escupen al Cadáver de Cristo.

¿Puede decirse que es imprecación este soneto?
¿Que no es el Mundo así ni así ocurre en la mayor parte de este planeta? Pero, ¿es que se salva siquiera eso que llaman Tierra Santa?
Y ¿cabe fiarse de los sacerdotes que tanto hablan de caridad , de paz, de perdón, de amor y de gloria sobre la Tierra? ¿Y de los planes de paz de las organizaciones Universales?

A las puertas del Año Nuevo del 2009, cuyos goznes comienzan a girar, el Mundo es una caldera, que cada vez se calienta más, siempre a pinto de explotar. Analice quien quiera hacerlo y ya verá que a medida que se camina hacia adelante, los abrojos son más abundantes y los humanos, menos de fiar...O sea, ¿qué quieren que les diga?

2 comentarios:

aruca dijo...

En estas fechas,que todo son felictaciones,buenos deseos,alegría y festejos,poco nos acordamos de los mas desfavorecidos,de la gente que pasa hambre y frío,de l@s sin techo;de las guerras,de los abusos,del maltrato o/y del terrorismo.Se nos vende que festejamos al redentor y que tenemos que hacer lo que se supone,no hacemos el resto del año;y eso debe de estar bién.Solamente que cuando miramos a nuestro alrededor y vemos tanta miseria,hambre,guerras,y tantas cosas que como muy bien dice Albino,parece que nadie hace nada por remediarlo.Con lo que nos gastamos en colesterol y espumillón,comerían muchos niños del tercer mundo que se está muriendo uno cada treinta segundos.
Yo admito mi culpa de,aunque sea en pequeña medida colaborar a que esto siga así.Porque la nochebuena es ni mas ni menos,que una noche más y una noche menos.Es decir una noche mas que vivimos y una noche menos que nos queda;como todas las noches.
Salud y paz

juan benjamin dijo...

Coincido contigo que estas fechas son bastante más que luces, dulces y celebraciones religiosas y sociales. Hay muchas personas que tambien estos dias carecen de paz, libertad, trabajo, salud, vivienda y es necesario que lo tengamos en cuenta, para entre todos construir un mundo mejor. ¡Feliz año 2009 para tod@s!.