SIGO CREYENDO LO MISMO


Así es. Sigo creyendo lo mismo. Sigo viendo, políticamente hablando, que "la cuestión es hacer oposición", tal como hemos titulado uno de nuestros temas publicado aquí no hace mucho. Y a la vista de lo que conocemos y venimos observando a lo largo de los años, podemos decir que siempre ha sido así. Sobre todo, desde que en España existe Constitución. Pero hay que matizar. Se interpreta que la oposición que aquí nos topamos desmadrando la realidad es la que representa y constituye la derecha conservadora y, por tanto, como buena opositora en argumentos y subterfugios, la que no acepta resignadamente que esté gobernando el país una fuerza distinta a ella misma. Ella, heredera de los Reyes Católicos, admiradora de los cuarenta años de autocracia militarista anteriores a la actual Constitución, es comprensible que no vea con agrado otro Gobierno que no sea el suyo en España. Y como es comprensible eso, lo es asimismo que, con razón y sin ella, busque toda ocasión para reprobar, censurar, criticar, negar y obviar lo que el actual Gobierno de España venga haciendo.


Ello así, viene a cuento referir que el PP e IU, -- en principio, bien contrarios ideológicamente--hablan de tremenda decepción porque, en la visita de Zapatero a Asturias, el presidente del Gobierno no dio plazos concretos para la finalización de las obras del AVE. Para el sotrondino Isidro Fernández Rozada, de estar de ministro de infraestructuras Álvarez Cascos, habría fechas, rutas, calendario de horarios, estaciones , además de la gloria bendita, todo concretado y todo establecido. Naturalmente, además de Isidro, el presidente del PP de Asturias, Ovidio Sánchez, dice que asistieron a un acto de puro maquillaje." O sea, que aquí no se da una a derechas, por parte de la izquierda, por lo que se ve, para las y los derechas.

Y si no, ¿qué decir de lo que dijeron cuando "la excavación del primer túnel de la Variante concluyó con 8 meses de adelanto"? Pues, como quedó registrado, para "el PP Zapatero intenta colgarse una medalla por una obra que fue ideada, proyectada y adjudicada el Gobierno de Aznar". Y aquí tampoco se acierta en nada. En nada, porque los demás no son nada y ellos, por lo que parece, lo son todo.

Si cupiese una simple meditación
, cabría decir que no sé de qué me extraño. Eso y mucho más ha ocurrido --y hemos visto-- durante largos años. Y es por eso que siempre hemos entendido como verdadero el verso de Antonio Machado: que hay dos Españas y que una ha de helarnos el corazón. Helarlo o dejarlo seco de susto y de asombro, porque, aunque debiéramos estar curados de espanto, no acabamos de estarlo. No ha lugar a ello.

No hay comentarios: